Garantía del bienestar social en contexto de adaptación segura y flexible a la COVID-19

DAO NGOC DUNG
Miembro del Comité Central del Partido Comunista de Vietnam, Ministro de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales

14:28, 05-07-2022

Revista Comunista – La garantía del bienestar social es una tarea regular e importante y una responsabilidad tanto del sistema político como de toda la sociedad. Durante más de dos años de la pandemia de COVID-19, así como en el actual estado de “nueva normalidad”, el Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales ha asesorado al Partido y al Gobierno en la toma de muchas decisiones importantes y de gran avance, contribuyendo oportunamente a asegurar el bienestar social para decenas de millones de personas y empresas.

El miembro del Buró Político y primer ministro de Vietnam, Pham Minh Chinh, visita a los pescadores en la comuna de Ca Na, distrito de Thuan Nam, provincia de Ninh Thuan _Foto: Agencia Vietnamita de Noticias

La pandemia de COVID-19, especialmente el cuarto brote en el país, ha afectado en gran medida el trabajo y el bienestar social de las personas. Según datos de la Oficina General de Estadísticas, se estima que la cantidad de personas que perdieron su trabajo representó alrededor del cinco por ciento, y el 32 por ciento de los empleados tuvieron que tomar un receso o suspender temporalmente la producción o sus negocios; casi el 50 por ciento de los trabajadores vieron recortados sus horarios laborales; y aproximadamente el 80 por ciento sufrieron la reducción de ingresos. El ingreso mensual promedio de los empleados en el tercer trimestre de 2021 fue de unos 222,7 dólares, una merma de 37,56 dólares con respecto al segundo trimestre y de 25,82 dólares con relación al mismo lapso del año anterior. Se trata de una disminución significativa, que debilitó el poder adquisitivo y afectó negativamente la vida de los trabajadores.

En ese contexto, en cumplimiento de las funciones y tareas asignadas, en primer lugar, el Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales propuso al Partido y al Gobierno implementar metódicamente las políticas sociales, enfocadas en el mejoramiento cada día del cuidado de las personas con méritos revolucionarios, beneficiarios de amparo social y sectores vulnerables, especialmente durante el período en que todo el país se vio fuertemente afectado por la pandemia de COVID-19. Asesoró y sometió a la consideración del Gobierno para su promulgación dos decretos que detallan una serie de artículos de la Ordenanza de Preferencias para Personas con Méritos Revolucionarios (2020), asegurando una mejor atención a esos pobladores, tanto en lo material como en lo espiritual. Extendió la cobertura y elevó el nivel de la asistencia social a través de la asesoría al Gobierno para que emitiese el Decreto No. 20/2021/ND-CP el 15 de marzo de 2021 sobre la regulación de las políticas de asistencia social, aumentando el nivel estándar de apoyo mensual a 15,42 dólares a partir del 1 de julio de 2021 y ampliando los grupos de personas beneficiadas. Presentó oportunamente al Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Vietnam para su promulgación de la Directiva N° 05-CT/TW, del 23 de junio de 2021, sobre el fortalecimiento del liderazgo del Partido en la reducción sostenible de la pobreza hasta 2030. Asesoró al Gobierno en la emisión del Decreto N° 108/2021/ND-CP, del 7 de diciembre de 2021, por el que se reajustaron las pensiones, los subsidios del seguro social y las asignaciones mensuales (en vigor a partir del 1 de enero de 2022), al aumentar en un 7,4 por ciento esos estipendios para las personas que reciben pensiones bajas y aquellas que se jubilaron antes de 1995. Para expandir la cooperación internacional en materia de bienestar y seguro social, el Gobierno firmó el Acuerdo bilateral Vietnam-Corea del Sur sobre el seguro social. Este es el primer acuerdo a nivel gubernamental sobre el seguro social que Vietnam ha firmado con un socio extranjero, en aras de asegurar los derechos y beneficios legítimos para los trabajadores de ambas partes.

En segundo lugar, la cartera asesoró al Gobierno y al Primer Ministro en la emisión de muchas directrices y políticas, incluidas algunas sin precedentes, como la Resolución No. 68/NQ-CP, del 1 de julio de 2021, sobre algunas políticas para apoyar a los empleados y empleadores que enfrentan dificultades debido a la pandemia de COVID-19, y la Resolución No. 116/NQ-CP, del 24 de septiembre de 2021, sobre las políticas de respaldo a los empleados y empleadores afectados por la pandemia de COVID-19 con el Fondo del Seguro de Desempleo. Se implementaron muchas soluciones y emitieron muchos paquetes de asistencia oportunos para los pobladores, empleados y empleadores con el fin de asistirlos en la superación de las dificultades y contribuir a minimizar los impactos negativos de la pandemia. Se puede afirmar que las políticas de asistencia a las personas y empresas afectadas por la pandemia, en especial la Resolución No. 68/NQ-CP y la Decisión No. 23/2021/QD-TTg sobre el apoyo a los trabajadores y empleadores que enfrentan dificultades por la COVID -19, se desplegaron en la dirección correcta, de manera práctica y orientada a las personas designadas. Los dos documentos se implementaron con procedimientos muy simples, reduciendo en dos tercios la carga y el tiempo de los trámites con respecto a las pólizas emitidas anteriormente.

Como resultado, en solo unos meses, en medio de condiciones muy difíciles debido a que las localidades reforzaron las medidas de distanciamiento social, la implementación de las resoluciones No. 68/NQ-CP y No. 116/NQ-CP brindó efectos prácticos y recibió alto consenso del público. Se trata de las políticas muy humanas, que muestran la atención y el apoyo del Partido y el Estado al pueblo y los trabajadores, así como sus esfuerzos por compartir con la población la superación de las dificultades.

A partir de esas políticas y del esfuerzo y el consenso del pueblo, la mayoría de los trabajadores y pobladores superaron proactivamente los desafíos, y gran parte de las empresas respaldaron a sus empleados durante la pandemia.

Las políticas no solo se dirigen a los trabajadores, sino también a personas vulnerables, como ancianos, huérfanos y discapacitados, y se han implantado de forma firme, rápida y simplificada en términos de procedimientos.

Además, a partir de la Resolución No. 68/NQ-CP, muchas provincias y ciudades han creado diversos métodos de apoyo, como enviar paquetes de bienestar social y alimentos a los hogares en las zonas de distanciamiento social para que se sientan seguros en medio de la lucha antiepidémica. Solo en 2021, a través de la materialización de las resoluciones No. 68/NQ-CP y No. 116/NQ-CP, el Gobierno y las localidades destinaron un total de tres mil 170 millones de dólares para apoyar a 741 mil 930 empleadores (con 558 millones de dólares), más de 43,78 millones de trabajadores y otros sujetos (con más de dos mil 610 millones de dólares). Específicamente, en cumplimiento de la Resolución No. 68/NQ-CP (modificada por la Resolución No. 126/NQ-CP, del 10 de agosto de 2021, que ajusta y complementa la Resolución No. 68/NQ-CP, emitida el 1 de julio de 2021 por el Gobierno, sobre algunas políticas para apoyar a los empleados y empleadores en dificultades debido a la pandemia de COVID-19) y la Decisión No. 23/2021/QD-TTg (modificada por la Decisión No. 33/2021/QD-TTg, emitida el 6 de noviembre de 2021 por el Primer Ministro: Enmienda y complementación de algunos artículos de la Decisión No. 23/2021/QD-TTg, promulgada el 7 de julio de 2021 por el Primer Ministro sobre la implementación de algunas políticas de asistencia a los empleados y empleadores que enfrentan dificultades debido a la COVID-19), 378 mil 330 empleadores, más de 30,9 millones de trabajadores y otras personas en todo el país recibieron un apoyo ascendente en total a mil 540 millones de dólares. Al implementar la Resolución No. 116/NQ-CP y la Decisión No. 28/2021/QD-TTg, emitida el 1 de octubre de 2021 por el Primer Ministro, que regula el despliegue de políticas de apoyo a los empleados y empleadores afectados por el COVID-19 a partir del Fondo de Seguro de Desempleo, 363 mil 600 empleadores y 12,86 millones de empleados se beneficiaron de una asistencia total de más de mil 630 millones de dólares.

Si bien los recursos no son cuantiosos, se han cumplido oportunamente las tareas de garantía del bienestar social y asistencia económica, especialmente en los centros y áreas clave de crecimiento. Los resultados alcanzados se deben a la gran participación y firme determinación de todo el sistema político, el pueblo y las fuerzas en la primera línea de la lucha antiepidémica, que han promovido el espíritu de solidaridad, consenso y esfuerzo conjunto, y movilizado todos los recursos para superar la epidemia, proteger la salud, estabilizar la vida de las personas y garantizar las actividades productivas y comerciales. Cabe destacar también los grandes esfuerzos de todos los niveles, sectores, comunidades empresariales y ciudadanos en todo el país, para que el mercado laboral se recupere rápidamente en los últimos meses de 2021 y comience a revitalizarse con fuerza en el tiempo posterior.

Siguiendo de cerca la evolución del mercado laboral, el sector de trabajo y asuntos sociales se enfoca en asesorar, advertir y proponer la implementación oportuna de medidas para abordar la interrupción de la cadena de suministro de manos de obra y estabilizar el mercado laboral; estudiar y recomendar proactivamente al Partido, la Asamblea Nacional y el Gobierno soluciones para la recuperación y políticas de garantía del bienestar social ante el impacto de la pandemia de COVID-19. El Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales informó al Gobierno un Programa de recuperación y desarrollo del mercado laboral en asociación con la garantía del bienestar social, con dos fases: una de recuperación y otra de avance con mecanismos y políticas sincrónicas, drásticas y fuertes. Particularmente, se centró en siete grupos de políticas: apoyar en efectivo a algunos grupos de trabajadores con el fin de retenerlos y atraerlos de regreso a su trabajo; asistir a los establecimientos comerciales y empleados con préstamos preferenciales; conectar la oferta y la demanda laboral; respaldar la capacitación; invertir en instalaciones para atender a las personas vulnerables afectadas por la epidemia; acelerar la transformación digital en el sector asociada con la base de datos nacional sobre población; construir viviendas sociales para trabajadores pobres y migrantes.

A través de la pandemia de COVID-19, se evidencia más el importante papel del sistema del bienestar social para garantizar la seguridad de los pobladores en medio de las fluctuaciones socioeconómicas, preparar recursos para garantizar algunos servicios sociales básicos, con el fin de evitar riesgos y asegurar la equidad de oportunidades para todas las personas. En 2022, el Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales se centra en implementar de forma sincrónica una serie de soluciones clave:

Primero, revisar y perfeccionar el sistema legal, los mecanismos y políticas encaminados a garantizar el bienestar social, centrándose en tres contenidos: habilidad laboral, empleo satisfactorio y bienestar social sostenible con dos pilares básicos, a saber, el seguro social y el seguro médico. Estudiar y construir una red de protección social en la dirección de ampliar el alcance y los beneficiarios, con tres etapas: prevención, mitigación y superación de riesgos; con la pauta de apoyar e incentivar a las personas a superar los desafíos y evitar la dependencia, así como acercarse a los estándares internacionales.

Segundo, apoyar la recuperación y el desarrollo del mercado laboral y mantener los recursos humanos, especialmente en parques industriales, zonas de procesamiento para las exportaciones y centros de crecimiento; fortalecer las medidas para retener a los trabajadores en sus puestos laborales, evitando la interrupción de la cadena de suministro de fuentes laborales para la producción y negocios de las empresas; y ayudar a los empleados a obtener préstamos del Fondo Nacional de Empleo. Se trata de una de las tareas de máxima prioridad para restaurar la economía en el próximo período.

Tercero, elaborar e implementar de manera sincrónica y efectiva los programas de objetivos nacionales para el período 2021-2025, especialmente sobre la reducción sostenible de la pobreza, en una dirección integral y multidimensional; garantizar los recursos y ejecutar plenamente las políticas de reducción sostenible de la pobreza con el lema “Todo el país une manos por los pobres, sin dejar a nadie atrás”.

Cuarto, desplegar de manera sincrónica los contenidos de la reforma de las políticas de seguro social, perfeccionar las de seguro de desempleo para prevenir y evitar esa condición y asegurar los empleos según el espíritu de la Resolución No. 28-NQ/TW, del 23 de mayo de 2018, sobre la reforma de las políticas de seguro social; presentar al Gobierno la modificación de la Ley de Seguro Social, ampliar los sujetos participantes (tanto de forma obligatoria como voluntaria), asegurando gradualmente el bienestar social frente a las manifestaciones negativas y los riesgos del mercado laboral; impulsar la aplicación de la tecnología de la información, y reformar los procedimientos administrativos en la solución de los asuntos relacionados a seguro social y desempleo.

Quinto, fortalecer la efectividad de las políticas del bienestar social vigentes, buscar un sistema al respecto que responda a choques de gran escala: trazar escenarios y planes para garantizar la seguridad de los pobladores, hogares pobres y personas desfavorecidas de acuerdo con la lucha contra la COVID-19 en las localidades. Continuar perfeccionando los mecanismos y políticas relacionadas para ampliar la participación de todos los sujetos, brindar cada vez más servicios con mejor calidad, creando condiciones favorables para que todos los ciudadanos asuman la responsabilidad, eleven la capacidad y participen de forma práctica en la garantía de la seguridad y el bienestar social.

Sexto, fortalecer la aplicación de la tecnología de la información, promover la transformación digital de manera fundamental para administrar los sectores a cargo del Ministerio de Trabajo, Inválidos de Guerra y Asuntos Sociales; reforzar la inspección y el control, crear un entorno saludable para el desarrollo, y centrarse en proteger a las mujeres, los niños y las personas vulnerables de los riesgos./.

-------------------------------

Este artículo fue publicado en la Revista Comunista No. 991 (junio de 2022)