Continuar renovando y elevando la eficiencia operativa de las empresas estatales, en aras de construir una economía vietnamita independiente y autosuficiente en medio de la integración global
Revista Comunista - En Vietnam, las empresas estatales tienen una posición y papel de especial importancia, confirmados tanto a nivel teórico como en la práctica. Sin embargo, para desarrollar una economía nacional independiente y autosuficiente en medio de la integración global, es una tarea apremiante continuar renovando y mejorando la eficiencia operativa de esas firmas, que constituyen la fuerza medular de la economía estatal.
Papel de las empresas estatales en la construcción de una economía vietnamita independiente y autosuficienciete en medio de la integración global
En medio de los cambios imprevistos en el escenario internacional y el proceso de globalización, Vietnam necesita preparar la fuerza intrínseca para la autosuficiencia en diferentes aspectos, incluida la garantía de la capacidad de ser económicamente independiente y autónomo, en aras de asegurar su independencia y autodeterminación nacional. Se trata de una economía altamente adaptable a las fluctuaciones de la situación externa, resistente a los vientos adversos, y capaz de mantener las actividades con normalidad para el desarrollo socioeconómico y servir de manera útil a las tareas de defensa y seguridad nacional.
Los documentos del XIII Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam (PCV) exigen: “Mantener firme la independencia y autonomía en la determinación de las prioridades, lineamientos y estrategias de desarrollo económico nacional. Desarrollar las empresas vietnamitas convirtiéndolas en el núcleo de la economía nacional; mantener las grandes balanzas y la seguridad de la economía; y fortalecer sin pausa el potencial económico del país”(1). Entonces, durante el XIII Congreso Nacional, la construcción de una economía independiente y autosuficiente se realzó de forma oficial como una tarea fundamental para traducir en realidad la aspiración de desarrollo de Vietnam en la nueva coyuntura, en la cual la garantía de las grandes balanzas se considera una de las medidas para asegurar la independencia y autonomía de la economía. De lo contrario, la economía corre el riesgo de sufrir la dependencia o afectación de los factores externos, lo que implica consecuencias impredecibles. La consideración de las grandes balanzas como contenido de las medidas para construir una economía independiente y autosuficiente representa un avance en la percepción teórica del PCV en los documentos del XIII Congreso Nacional, en comparación con las anteriores magnas citas.
Para construir una economía independiente y autosuficiente según la visión del PCV, una de las tareas urgentes de mayor prioridad es resolver rápidamente los “cuellos de botella” para que las empresas vietnamitas puedan crecer a un alto ritmo, convirtiéndose en el núcleo de la economía. De ellas, las firmas estatales poseen una misión, posición y papel importantes, al liderar, motivar, abrir el paso, orientar, atraer y promover el desarrollo de las otras. Las compañías de capital estatal también promueven la conectividad de las cadenas de valor agregado; impulsan las políticas de crecimiento económico, seguridad social y reducción de la pobreza; así como protegen y desarrollan de manera directa los recursos importantes del país y ocupan la posición dominante en múltiples sectores y ámbitos clave de la economía. Además, deben garantizar las principales balanzas de la economía, en materia de electricidad, carbón, productos químicos básicos, gasolina, petróleo, gas e infraestructuras de transporte aéreo, ferroviario y vial. Al mismo tiempo, deben tomar la vanguardia en el incremento de la competitividad de la economía y el sector empresarial de Vietnam en general. En la nueva coyuntura, las empresas estatales deben, en primer lugar, integrarse rápidamente a los sectores de alta tecnología y aquellos capaces de acelerar la modernización e industrialización de la estructura económica, tales como infraestructura digital, mecánica de precisión moderna, fabricación de componentes, maquinaria y dispositivos completos para las industrias manufactureras, tecnologías originales, materiales alternativos, nuevas energías y equipos espaciales, marítimos e inteligentes.
En paralelo con el proceso de renovación del pensamiento y el desarrollo de la economía y de las empresas de todos los sectores en medio de la integración global, los puntos de vista del PCV acerca de la posición y el papel de las firmas estatales en la economía se han perfecionado en cada etapa.
Justo desde el VI Congreso Nacional, se afirmó que la economía dirigida por el Estado “juega un papel protagónico al controlar los otros sectores económicos… ampliar de manera proactiva la conexión con otros renglones, dirigiéndolos hacia la órbita del socialismo”(2). Ese punto de vista se confirmó en los Documentos del VII Congreso Nacional, los cuales declaran que la economía dirigida por el Estado controla las ramas y ámbitos clave para demostrar su protagonismo. Durante el VIII Congreso Nacional, tras recopilar las lecciones teóricas y prácticas del proceso de Doi Moi (Renovación), se sustituyó el concepto de “economía dirigida por el Estado” por “economía estatal” con un nuevo significado. El PCV determinó que la economía estatal “desempeña un papel protagónico”.
Basada en los resultados de la operación de las empresas estatales, la Resolución del III pleno del Comité Central del PCV del IX mandato sobre “La continuación de la reorganización, renovación, desarrollo y mejoramiento de la eficiencia de las firmas estatales” señala que esas entidades “ocupan una posición clave en la economía, sirven como herramienta material importante para la orientación y gestión macroeconómica por parte del Estado, así como la fuerza central que contribuye de manera principal al ejercicio por parte de la economía estatal del papel protagónico en la economía de mercado con orientación socialista, y un actor clave en la integración global”(3).
El X Congreso Nacional adoptó ajustes sobre la posición de las empresas estatales, al exigir “eliminar el monopolio y los privilegios de las firmas estatales en la producción y los negocios… principalmente en sectores como infraestructuras, generación de importantes materiales de producción y servicios de la economía, así como algunas áreas del bienestar público”(4). El XI Congreso Nacional reafirmó esa visión.
Durante el XII Congreso Nacional, el PCV recalcó y esclareció aún más el papel de las empresas estatales, sobre todo en los renglones esenciales y clave, áreas estratégicas y la defensa-seguridad, y otros ámbitos en los que no invierten las entidades de otros sectores económicos. La Resolución 12-NQ/TW, del 3 de junio de 2017, adoptada en el V pleno del Comité Central del XII mandato, sobre “La continuación de la reestructuración, renovación y mejoramiento de la eficiencia de las empresas estatales” concretó la visión del XII Congreso Nacional al destacar aún más claramente el papel de esas entidades: “Las empresas estatales ocupan una posición clave y son una fuerza material importante de la economía estatal, que contribuye al desarrollo económico, el progreso y la igualdad sociales; y motivan el crecimiento de las compañías de otros sectores económicos, garantizando que la comunidad empresarial vietnamita se convierta realmente en una fuerza clave en el desarrollo socioeconómico, la modernización e industrialización nacional, y la construcción de una economía independiente y autosuficiente en medio de la globalización e integración internacional”(5).
Heredando esos puntos de vista, el XIII Congreso Nacional afirmó: “La economía estatal es la herramienta y fuerza material importante para que el Estado estabilice la macroeconomía; oriente, regule e impulse el progreso socioeconómico y resuelva los defectos del mecanismo de mercado… Las empresas estatales se centran en sectores y áreas clave, la defensa y seguridad; operan según el mecanismo de mercado y aplican la gestión moderna según estándares internacionales; toman la eficiencia económica como principal criterio de evaluación y compiten de manera justa con las firmas de los otros sectores económicos”(6).
Institucionalizando los puntos de vista y lineamientos del PCV, el Gobierno de Vietnam promulgó una serie de políticas sobre la renovación, reorganización y desarrollo de las empresas estatales. Ese proceso se viene realizando desde principios de los años 90 del siglo XX.
Panorama actual de las empresas estatales
Bajo el liderazgo del PCV y la gestión drástica del Gobierno, y gracias a los esfuerzos de las empresas estatales, la reorganización, renovación, fortalecimiento y transformación de esas entidades en sociedades anónimas en la actualidad han alcanzado los siguientes logros:
Primero, la cantidad de empresas estatales se ajusta paso a paso, en correspondencia con las necesidades de desarrollo de la economía.
Hasta el 31 de diciembre de 2020, Vietnam contaba con 646 empresas donde el Estado posee más de la mitad de su capital estatutario, que incluyen: 459 firmas con totalidad de capital estatal, entre ellas seis grupos económicos, 52 corporaciones, 15 sociedades unipersonales de responsabilidad limitada que operan con el modelo de empresa matriz-filial y 386 sociedades unipersonales de responsabilidad limitada independientes; y 187 compañías con más de la mitad del capital perteneciente al Estado, entre ellas tres grupos, 15 corporaciones, dos sociedades de modelo matriz-filial y 167 firmas independientes (162 sociedades anónimas y cinco sociedades de responsabilidad limitada de dos o más miembros)(7).
Como resultado de los esfuerzos de renovación, reorganización y reestructuración, el número de empresas estatales disminuyó drásticamente, mientras que sus campos de operación también se contrajeron. Pese a esa reducción, las actividades de esas firmas no cayeron, sino que están operando con una mayor eficiencia y sencillez.
Segundo, resultan apreciables los resultados de producción y negocios de las empresas en general.
Al cierre de 2020, los activos totales de las empresas estatales fueron de 3.573.698 mil millones de dongs (equivalente a 152 mil millones de dólares), un aumento de uno por ciento en comparación con 2019. De ellos, los activos fijos representaron el 36 por ciento del total. Los recursos propios fueron de 1.680.303 mil millones de dongs, un incremento de uno por ciento. El Estado depositó en las empresas 1.573.471 mil millones de dongs, es decir, un incremento de dos por ciento en comparación con 2020.
En particular, los 19 grupos y corporaciones dependientes de la Comisión para la Gestión de Capital Estatal en Empresas mantuvieron las actividades y alcanzaron logros notables pese a los grandes impactos de la pandemia del COVID-19. En 2021, sus ingresos totalizaron 821 billones 295 mil millones de dongs, equivalente al 99 por ciento del objetivo y 108 por ciento de lo alcanzado en 2020; mientras las ganancias antes de impuestos superaron el 70 por ciento del plan anual y representaron el 93 por ciento del 2020, al alcanzar 34 billones 179 mil millones de dongs. De las entidades mencionadas, 13 empresas cumplieron o sobrepasaron los ingresos proyectados, 14 alcanzaron o sobrecumplieron el plan de contribución financiera al presupuesto estatal y cuatro registraron contribuciones imponibles superiores a lo planeado para el 2021 y lo pagado en el año previo.
Se pusieron en marcha numerosos proyectos de gran escala e importancia para el impulso del desarrollo socioeconómico del país, tales como las plantas hidroeléctricas Hoa Binh e Ialy ampliadas, la central termoeléctrica Quang Trach I, el aeropuerto internacional Long Thanh, la terminal T3 del aeropuerto Tan Son Nhat, la terminal T2 del aeropuerto Cat Bi y la ampliación del aeródromo Dien Bien. El Grupo de Correo y Telecomunicaciones de Vietnam y la Corporación de Telecomunicaciones MobiFone construyeron seis mil 61 estaciones de cuarta generación (4G) y tres mil 675 infraestructuras de telecomunicaciones y de la tecnología de la información.
Son innegables la importancia y contribución de las empresas estatales al desarrollo socioeconómico de Vietnam, sobre todo en los siguientes aspectos:
Primero, las empresas estatales son una fuerza importante de la economía, que contribuye a la estabilidad macroeconómica, la garantía de las principales balanzas de la economía y el impulso del desarrollo socioeconómico.
Segundo, las empresas estatales desempeñan el papel central y directivo en algunas ramas clave de la economía, tales como finanzas-banca, gas, electricidad, carbón, minería, química básica, telecomunicaciones, infraestructuras de transformación digital, transporte, suministro de petróleo y gasolina y alimentos, que garantizan las condiciones para las actividades de las otras empresas y sectores económicos, a la vez que satisfacen la demanda de consumo interno y el comercio exterior.
Tercero, en 2020 las empresas estatales acompañaron a toda la nación en el enfrentamiento a la COVID-19, ofrecieron apoyo a los compatriotas en las zonas afectadas en el mundo y suministraron insumos químicos, materiales y equipos antiepidémicos. Especialmente, eliminaron o redujeron las tarifas y precios de servicios y alimentos por valor de 24 billones de dongs para estabilizar el mercado y apoyar a la población y las empresas. Las firmas estatales tomaron la vanguardia en la garantía de la seguridad social según la visión del PCV y el Estado. Durante los últimos cinco años, proporcionaron más de nueve billones de dongs a programas de seguridad social y reducción rápida y sostenible de la pobreza, además de ofrecer asistencia directa a 54 de los 62 distritos pobres en el país.
Datos oficiales señalan que las empresas estatales registran la más alta eficiencia en el empleo de la fuerza laboral, de 18,9 veces, mientras esa tasa en las compañías privadas y el sector de inversión extranjera directa (IED) es de 17 y 13 veces, respectivamente. Su coeficiente de endeudamiento es de 3,4 veces, en comparación con las cifras de dos y 1,6 veces de las empresas privadas y el sector de IED, respectivamente . En cuanto a la rotación de capital, esas tasas son de 0,4; 0,6 y 1, en cada caso. La tasa de rentabilidad de las empresas estatales resulta superior a la de las firmas privadas, pero inferior a la del sector de IED. En general, los resultados de las entidades estatales no se corresponden con el potencial y los recursos que poseen, pero generan ciertas expectativas.
En comparación con los demás sectores, la calidad y eficiencia de las empresas estatales resultan modestas. En otras palabras, deben consumir más capitales para crear el mismo valor del producto final, hecho que reduce la eficiencia de sus inversiones.
En los últimos años, se han realizado reajustes y reformas reduciendo el número de empresas estatales en posiciones que no requieren su presencia, tanto en términos de campos que cuentan con esas entidades como la cantidad de firmas que operan en una determinada rama. Como resultado, el número de empresas estatales cayó en paralelo con la reestructuración, conversión en sociedades anónimas y retiro de capital estatal en las compañías. Al cierre de 2020, las empresas estatales representaron apenas el 0,08 por ciento de las activas pero siguieron dominando numerosos recursos importantes de la economía y controlaron el 25,78 por ciento del capital total de las compañías(8). Atrajeron un millón 100 mil trabajadores, equivalente al 7,3 por ciento de la fuerza laboral de la comunidad empresarial. Pese a su reducción el año pasado, la contribución de esas firmas siguió siendo un ingreso importante y estable del presupuesto estatal.
Al lado de los logros, las empresas estatales muestran insuficiencias y debilidades, tales como la modesta eficiencia operativa y competitividad, que no se corresponde con los recursos que poseen. Aunque cuentan con alrededor del 60 por ciento de los recursos sociales, esas entidades solo contribuyen con casi el 40 por ciento al Producto Interno Bruto (PIB) nacional, y el restante proviene de las firmas privadas y el sector de IED. Es decir, las empresas estatales todavía no aprovechan al máximo los capitales.
Además, no han mostrado de manera palpable su papel de liderar, motivar y propiciar el desarrollo de otros sectores económicos. No son las verdaderas potencias en los renglones y ámbitos decisivos para el incremento de la competitividad de la economía y la comunidad empresarial de Vietnam.
El XIII Congreso Nacional del PCV señaló: “Muchas empresas estatales tardan en reestructurarse y renovar el mecanismo de administración; el retiro del capital estatal de esas compañías y su transformación en sociedades anónimas enfrentan obstáculos generados por la legislación vigente y durante el proceso de realización; la eficiencia de la producción y negocios resulta baja; mientras que la situación de endeudamiento, pérdida y despilfarro sigue siendo preocupante”(10).
Seguir renovando y mejorando la eficiencia de las empresas estatales según la visión del XIII Congreso Nacional del PCV
El XIII Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam planteó las orientaciones para seguir mejorando la eficiencia de las empresas estatales, a saber: “Acelerar la liquidación de deudas, el retiro de capital estatal, la conversión en sociedades anónimas y la reestructuración de las firmas estatales; impulsar la innovación, elevar el nivel de aplicación tecnológica, aplicar la gobernanza corporativa moderna para incrementar la eficiencia, así como inspeccionar y supervisar de manera estricta la operación de las compañías para evitar pérdidas y el dispendio de capitales y bienes estatales”(11). Para materializar esas orientaciones, son fundamentales las siguientes medidas:
Primero, impulsar la reestructuración de las empresas estatales.
Continuar perfeccionando el marco legal para acelerar la reestructuración de las empresas; optimizar el usufructo de los ingresos obtenidos por el cambio de propietarios de capital en las firmas y entidades de servicio público, así como por la transferencia de activos estatales; renovar la supervisión financiera y la evaluación de la eficiencia de los grupos económicos, las corporaciones y compañías estatales; aplicar de forma piloto la transformación de algunos grupos y corporaciones con la totalidad de capital estatal en sociedades anónimas cuyos accionistas son organizaciones económicas y empresas estatales que realizan inversiones y negocios con activos del Estado.
Acelerar la liquidación de deudas, retiro de capital y conversión de empresas estatales en sociedades anónimas de forma efectiva, transparente y abierta, con un mecanismo capaz de supervisar, detectar y resolver de manera oportuna los posibles errores. Intensificar la inspección y supervisión sobre el uso del capital en las empresas estatales. Resolver al fondo los proyectos ineficientes de manera transparente y abierta, con apego al mecanismo de mercado y la ley. El Estado no invierte ni añade capital procedente del presupuesto estatal en esos proyectos. La disolución o quiebra de las empresas ineficientes debe garantizar los intereses más altos del Estado y los derechos e intereses legítimos de los trabajadores e inversores.
Promover la descentralización para incrementar la competencia de las juntas de miembros y directivas de los grupos económicos y corporaciones estatales. Intensificar la inspección y supervisión por parte de la representación de los propietarios de capital para prevenir, detectar y sancionar de forma oportuna las infracciones conforme a las disposiciones de la ley.
Segundo, mejorar la eficiencia y competitividad de las empresas estatales.
Aplicar tecnologías modernas, la innovación y creatividad, y la administración según el estándar internacional para mejorar la eficiencia y competitividad de las empresas estatales. Adoptar políticas que estimulen la investigación, el desarrollo y la aplicación de la ciencia-tecnología avanzada en la producción, los negocios, la gestión y supervisión de las empresas. Acelerar la transformación digital, incrementar la transparencia de la información financiera y fortalecer la responsabilidad de rendir cuentas de las compañías. Desarrollar grupos económicos estatales de gran escala, alta eficiencia y capaces de competir con otras entidades en la región y el mundo en algunos renglones y áreas clave de la economía.
Tercero, renovar y mejorar la eficiencia del modelo de la agencia representativa de la propiedad del Estado en las empresas estatales y del capital del Estado en las compañías.
Fortalecer y perfeccionar el modelo de la Comisión para la Gestión de Capital Estatal en Empresas para promover su papel de controlar los bienes del Estado en las instituciones corporativas.
Cuarto, establecer un modelo de gobernanza corporativa moderno.
La elevación de la conciencia y renovación de la administración corporativa según los estándares comunes del mundo se deben asociar con el objetivo de incrementar la eficiencia de la tarea de otorgar a las empresas estatales la autonomía financiera y autorresponsabilidad, en aras de garantizar la competencia leal, igualdad e integración cuando esas entidades participan en el mercado.
Además, es esencial separar la propiedad y la administración. La eficiencia operativa de la empresa no depende de la propiedad, sino de la administración, es decir, si el último factor no se realiza de manera eficiente, la compañía no opera con normalidad. Con respecto a la propiedad, hay que clarificar el alcance de la supervisión del Estado, la gestión estatal y el papel del Estado como propietario de capital y su influencia en las decisiones de la empresa. El resultado de la reorganización, renovación y mejoramiento de la eficiencia de las compañías estatales debe estar asociado con la evaluación de la responsabilidad de los dirigentes. Las tareas del personal, la política de remuneración y bonificación deben basarse en la eficiencia operativa de las empresas de acuerdo con el mecanismo del mercado.
Al mismo tiempo, es necesario un mecanismo para monitorear de manera estricta la responsabilidad de los dirigentes de las empresas estatales. Hay que establecer un conjunto de criterios para evaluar el desempeño de cada tipo de empresas estatales según los objetivos planeados.
Quinto, separar los negocios y las actividades de interés público.
La separación entre las actividades de interés público y los negocios es un requisito objetivo en la economía de mercado. En principio, las empresas dedicadas a los negocios tienen como propósito maximizar las ganancias, mientras que aquellas de interés público operan por el bien de la sociedad. La separación posibilita que todas las actividades de las compañías sean transparentes, y su evaluación sea exacta. Una entidad que realiza los negocios y en paralelo desempeña un papel social no podrá alcanzar los objetivos de ganancias, o no cumplirá el rol social. Las empresas estatales pueden aprovechar esa carencia de transparencia para justificar la ineficiencia de sus negocios, echándole la culpa a la responsabilidad de cumplir los objetivos sociales o viceversa. Entonces, solo las empresas de interés público deberían ocuparse de los objetivos sociales; y las otras tendrían que obtener buenas ganancias compitiendo de forma leal con las firmas de otros tipos.
Sexto, impulsar la transformación digital en las empresas estatales.
Realizar la transformación digital nacional, desarrollar la economía digital e incrementar la productividad, calidad, eficiencia y competitividad de la economía constituyen una de las seis tareas clave de Vietnam, establecidas en la Resolución del XIII Congreso Nacional del PCV. Las empresas estatales tienen la capacidad y responsabilidad de liderar la transformación digital, para garantizar el cumplimiento del papel de liderazgo y el desarrollo sostenible de las firmas, y a la vez contribuir al éxito del proceso de digitalización a nivel nacional.
Séptimo, mejorar la capacidad y ética de los funcionarios encargados de la gestión de las empresas estatales.
Se debe perfeccionar el sistema de estímulo y apalancamiento financiero a la par de fortalecer la responsabilidad y disciplina en las empresas estatales; aplicar de forma amplia el mecanismo de contratación del personal a través de exámenes competitivos, abiertos y transparentes para todos los puestos gerenciales y ejecutivos, entre otros; y garantizar que todas las operaciones sean abiertas y transparentes, y que los gerentes cumplan la responsabilidad de rendir cuentas, en particular sobre la situación financiera, las inversiones, adquisiciones, utilización del capital estatal, gastos, resultados de negocios, distribución de utilidades, tareas del personal, grandes transacciones, activos e ingresos de los directivos./.
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(1) Documentos del XIII Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam, Editorial Política Nacional Su That (La Verdad), Hanoi, 2021, tomo I, pág. 135
(2) Documentos del Partido Comunista de Vietnam: Obras Completas, Editorial Política Nacional Su That (La Verdad), Hanoi, 2006, tomo 47, pág. 392
(3) Documentos del Partido Comunista de Vietnam: Obras Completas, Ibíd., 2016, tomo 60, pág. 602
(4) Documentos del Partido Comunista de Vietnam: Obras Completas, Ibíd., 2016, tomo 65, pág. 189
(5) Resolución 12-NQ/TW, del 3 de junio de 2017 del V pleno del Comité Central del XII mandato, sobre “La continuación de la reestructuración, renovación y mejoramiento de la eficiencia de las empresas estatales”
(6) Documentos del XIII Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam, Ibíd., tomo I, pág. 129
(7) Según el Informe 399/BC-CP, del 12 de octubre de 2021 del Gobierno, sobre “La inversión, gestión y uso de capitales estatales en las empresas en el país en 2020”
(8) Ministerio de Planificación e Inversión: Libro Blanco Empresarial de Vietnam 2021
(9) Vu Van Ha: “Construir y promvoer el papel de las empresas estatales en la actual coyuntura”, Revista Comunista en línea, del 25 de diciembre de 2020, https://www.tapchicongsan.org.vn/web/guest/kinh-te/-/2018/820756/xay-dung%2C-phat-huy-vai-tro-cua-doanh-nghiep-nha-nuoc-trong-dieu-kien-hien-nay.aspx
(10), (11) Documentos del XIII Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam, Ibíd., tomo I, págs. 81, 133-134
Este artículo fue publicado en la Revista Comunista No.998 (septiembre de 2022)