Revista Comunista - A lo largo de casi 40 años de implementación de la política de renovación nacional y la integración internacional, el comercio ha desempeñado un papel de suma importancia, un impulso para el crecimiento y el desarrollo de la economía de Vietnam, convirtiéndolo en uno de los mayores exportadores del mundo. No obstante, el sector enfrentó y ha afrontado grandes desafíos. Para superar las dificultades, impulsar el desarrollo del mercado doméstico y diversificar los mercados de exportación, Vietnam debe aplicar de manera sincrónica una serie de soluciones.

Lineamientos del Partido Comunista y políticas y leyes del Estado de Vietnam sobre el desarrollo comercial

Las orientaciones de la estrategia de desarrollo comercial de Vietnam se elaboran durante los congresos del Partido, en sintonía con el proceso de integración económica internacional y el crecimiento de la economía nacional, que se dividen en dos etapas:

La etapa de apertura y selección del modelo de crecimiento basado en las exportaciones, desde el VI Congreso Nacional (efectuado en 1986) hasta el X (2005): Durante ese período el Partido Comunista de Vietnam (PCV) y el Estado identificaron las exportaciones como uno de los pilares del modelo de crecimiento económico. En concreto, el PCV determinó transformar la estrategia de industrialización basada en la sustitución de las importaciones en un modelo mixto, a partir tanto de las exportaciones como del reemplazo de las importaciones. Al mismo tiempo, presentó tres grandes programas económicos: Alimentos, artículos de consumo y bienes exportables. El último en particular fue considerado como un programa clave y decisivo para numerosos objetivos económicos quinquenales (1986-1990), así como el centro de todas las relaciones económicas exteriores. Las exportaciones se convirtieron en el foco de atención de todos los sectores y niveles, los cuales tuvieron como objetivo aumentar rápidamente las ventas al extranjero y cubrir la demanda de importaciones. Durante su VIII Congreso Nacional en 1996, el PCV exigió construir una economía de integración, basada fuertemente en las exportaciones. Durante ese período, debido a la escala modesta de la economía y el bajo ingreso per cápita, el mercado interno no contribuyó de manera significativa al crecimiento económico.

Durante la etapa de reestructuración y ajuste del modelo de crecimiento que vincula el desarrollo de las exportaciones con la ampliación del mercado interno: Desde el XI Congreso Nacional del Partido, efectuado en 2011, hasta la fecha, la integración del país a la Organización Mundial del Comercio en 2007 y la acumulación del crecimiento en la etapa anterior contribuyeron de forma considerable a la ampliación del espacio de desarrollo y plantearon la exigencia de reestructurar la economía para adaptarse a la nueva situación y la rápida expansión del mercado interno. Durante el XI Congreso Nacional, el PCV exigió transformar el modelo de crecimiento basado en la explotación de recursos naturales y aprovechamiento de mano de obra barata y otras ventajas competitivas a uno que combina entre este modelo y el desarrollo enfocado en la aplicación de tecnología para la mejora de la productividad, calidad y eficiencia. Ese punto de vista se concretó en las orientaciones planteadas en la Estrategia de desarrollo socioeconómico en el período 2011-2020: “Ampliar el mercado interno y desarrollar fuertemente el comercio doméstico, además diversificar los mercados extranjeros, aprovechando los que firmaron tratados de libre comercio (TLC) con Vietnam y otros potenciales para impulsar las exportaciones  y reducir el déficit comercial y su proporción en la balanza comercial, con vistas a equilibrar las ventas y compras. Participar activamente en la red de distribución global, desarrollar rápidamente los sistemas para distribuir los productos nacionales con ventajas competitivas en los mercados interno y global, y construir la marca de productos vietnamitas”⁽¹⁾. Durante el XII Congreso Nacional, el PCV determinó: “Renovar el modelo de crecimiento basado en las exportaciones e inversiones, transformándolo en uno basado tanto en las exportaciones e inversiones, como en el mercado interno”⁽²⁾.

En cumplimiento de esa visión, la Asamblea Nacional y el Gobierno de Vietnam concretaron un sistema de leyes y políticas sincrónicas, entre ellas muchas destacadas⁽³⁾, contribuyendo a dar forma a un marco legal favorable para el desarrollo comercial y la participación de los actores económicos en ese proceso.

Desarrollo del comercio en Vietnam durante los últimos años

En los últimos años, Vietnam experimentó un rápido desarrollo comercial, ubicándose en el tercer lugar en la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), detrás de Indonesia y Tailandia, en términos de ventas al por menor y comercio electrónico, y convirtiéndose en uno de los mercados minoristas más atractivos.

Logros alcanzados por Vietnam en el desarrollo del comercio 

1- El desarrollo de las exportaciones 

El comercio exterior, al que contribuye activamente la integración económica internacional -durante la cual se firmaron y aplicaron 15 tratados de libre comercio-, engrandeció el espacio y el impulso de las exportaciones y se convirtió en un punto destacado en el panorama del crecimiento económico de Vietnam en los últimos años. Algunos logros destacados son:

Primero, la escala de las exportaciones está en continua expansión. La proporción de las ventas al exterior en comparación con el Producto Interno Bruto (PIB) nacional aumentó del 71,5 por ciento en 2011 al 104,2 por ciento en 2020 (si se incluyen las importaciones, esa cifra incrementa del 134,53 al 204,2 por ciento del PIB). En 2022, el valor del comercio exterior alcanzó 731 mil 300 millones de dólares, para un ritmo de crecimiento anual de 12 por ciento, casi cinco veces el promedio mundial y mayor que el de los principales competidores y otros países en la región. Paso a paso, Vietnam se ha ido convirtiendo en uno de los mayores países exportadores del mundo. En 2020, ocupó el lugar 20 en el ranking mundial y el segundo en la ASEAN (adelantado por Singapur). También se ubicó en el lugar 17 entre los países exportadores de productos industriales y procesados y figuró entre los 10 mayores de diferentes productos, tales como confecciones textiles, calzado, arroz y teléfonos móviles.

Segundo, la estructura de las exportaciones vietnamitas mejora de manera constante, siendo cada vez más sostenible y centrada en la industrialización, y manifestando una mayor resiliencia en los tiempos difíciles que enfrentan el comercio regional y global. La estructura de los bienes exportables está cambiando, con una fuerte disminución de la proporción de los productos en crudo o poco procesados (por ejemplo, la tasa de los combustibles y minerales cayó del 11,6 por ciento en 2011 al 1,3 por ciento en 2022) y un rápido aumento en las industrias de procesamiento y manufactura (del 61,3 por ciento en 2011 al 86 por ciento en 2022) y en los sectores de alta tecnología (el 41,4 por ciento en 2015 y más del 48 por ciento en 2022). Las exportaciones de Vietnam están cada vez más diversificadas, contribuyendo al mantenimiento e impulso del ritmo de crecimiento. La estructura de los mercados también cambia, con una creciente atención a los mercados que tienen TLC con Vietnam y altos criterios en cuanto a la calidad de bienes. Mientras, la estructura de los exportadores se está inclinando hacia las empresas nacionales.

Tercero, Vietnam participa cada vez más profundamente en la cadena de valor global y logró convertirse de un país con balanza comercial negativa en uno con creciente superávit, el cual registró un valor récord de 12 mil 400 millones de dólares en 2022. Particularmente, el superávit comercial de Vietnam provino sobre todo de mercados exigentes, entre ellos Estados Unidos y la Unión Europea, lo que contribuyó a equilibrar la balanza de pagos, mantener la estabilidad macroeconómica y crear un impulso directo para la producción y los negocios en el país.

2- El desarrollo del mercado interno 

El comercio interno alcanzó logros destacados, convirtiéndose en un nuevo impulso del sector y, junto con las exportaciones, formó la plataforma para el cumplimiento de los objetivos de crecimiento económico, especialmente durante los tiempos difíciles que enfrentó el mercado exterior. Algunos logros destacados son:

Primero, el mercado interno se ha desarrollado de manera vigorosa, con un ritmo de crecimiento constantemente al alza y una creciente contribución al PIB. La tasa de productos vietnamitas distribuidos a través de los canales minoristas se ha mantenido por encima del 80 por ciento, todo eso contribuyó a transformar la estructura de la economía incrementando la proporción de la industria y los servicios, en paralelo con el desarrollo de las marcas de productos nacionales. En la actualidad, Vietnam se está convirtiendo en un destino atractivo para los inversores, al poseer el tercer mayor mercado minorista en la ASEAN, por detrás de Indonesia y Tailandia. Vietnam logró establecer un sistema de mercado estable y unificado en todo el país, con una red de distribución de productos, sobre todo los de primera necesidad, de manera relativamente estrecha y vincular la producción con el mercado y el consumo. El contingente de empresarios creció sin cesar. La red de comercio y servicios está presente en todo el país, desde las ciudades hasta las áreas rurales, montañosas e insulares, contribuyendo a asociar la producción a la venta, y los productos al mercado interno.

Segundo, el mercado interno se ha desarrollado paso a paso en sintonía con el proceso de industrialización y modernización y ha contribuido a mejorar la calidad de vida. La estructura de las infraestructuras comerciales se ha modernizado (durante los últimos 10 años, la cantidad de supermercados y centros comerciales casi se duplicó), mientras la estructura de la propiedad se ha diversificado, con la participación de un gran número de empresas del sector no estatal y el crecimiento de grandes distribuidores nacionales. Eso contribuyó a modernizar el sector de ventas minoristas y reestructurar la distribución de productos a través de canales modernos,  cumpliendo así los requisitos de calidad e higiene alimentaria de los artículos en circulación.

Tercero, se ha realizado bien la tarea de conectar la demanda y la oferta. Los programas de reserva de bienes para estabilizar el mercado se han mantenido y ampliado estimulando la participación de la sociedad, lo que ha favorecido la producción. La gestión de los precios, especialmente de los productos básicos y de primera necesidad, ha seguido de cerca las señales del mercado, contribuyendo a estabilizar los precios y controlar la inflación en el límite previsto.

Cuarto, el comercio electrónico se ha desarrollado de forma vigorosa, convirtiéndose en un importante canal de distribución con un ritmo de crecimiento promedio anual de 27 por ciento durante el período 2011-2020. Representó casi el siete por ciento del mercado minorista interno -la tasa más alta en la ASEAN- y colocó a Vietnam en la lista de los cinco países con el mayor ritmo de crecimiento del comercio electrónico, contribuyendo a modernizar el sistema de distribución y crear un impulso para el desarrollo económico nacional.

Quinto, la disciplina y el orden se van estableciendo paso a paso en el mercado, minimizando las violaciones en la distribución y la venta de productos. La gestión del mercado, el manejo de la competencia, la defensa comercial, la protección de los derechos de los consumidores y la garantía de la calidad e higiene de los productos se han fortalecido cada vez más, contribuyendo a “limpiar” y mejorar la calidad del mercado.

Al lado de los logros, el comercio en Vietnam ha enfrentado numerosos desafíos. Las exportaciones todavía se concentran en el segmento de bajo valor agregado y dependen del sector de inversión extranjera directa (IED). El mercado interno cuenta con una modesta escala y todavía no aprovecha bien la demanda de un país con 100 millones de habitantes. El sistema de infraestructuras comerciales carece de sincronía y modernidad, especialmente en las zonas rurales y montañosas.

Algunas soluciones principales para impulsar las exportaciones en el futuro cercano

En el horizonte visible, la situación global se mantendrá complicada e impredecible; los conflictos geopolíticos y la competencia estratégica entre las potencias se intensifican; el nacionalismo extremo y el proteccionismo tienden a crecer en algunos grandes socios comerciales de Vietnam; la presión inflacionaria, el aumento de las tasas de interés y políticas monetarias más restrictivas en numerosos países debilitan la demanda global. Como consecuencia, los productos vietnamitas enfrentarán una mayor competencia cuando algunos países exportadores inician la reapertura económica después de lograr controlar la pandemia de COVID-19. Más allá, los países desarrollados están imponiendo cada vez más estándares y normas sobre la cadena de suministro, materiales limpios, mano de obra y medio ambiente a las importaciones. Por otro lado, la inestabilidad de la cadena de suministro, la fluctuación de los precios y los riesgos de seguridad emergentes (tales como el cambio climático, la degradación ambiental, el agotamiento de los recursos, desastres naturales, epidemias y la pobreza…) amenazan con provocar una nueva recesión global. Esos factores tendrán impactos desfavorables en las actividades comerciales globales en general, y en Vietnam en particular.

En ese contexto, para promover los logros alcanzados y manejar bien las deficiencias identificadas para superar las dificultades, impulsar el desarrollo del mercado interno y diversificar los destinos receptores, en el futuro cercano es necesario implementar con eficiencia las labores y soluciones presentadas en las estrategias, planes y proyectos sobre la reestructuración de la economía y del sector comercial, el desarrollo del comercio interno y el impulso de las exportaciones hasta 2030, con visión hacia 2045. En particular, la rama de la industria y el comercio debe implementar con sincronía y eficiencia las siguientes soluciones clave:

Para desarrollar las exportaciones: 

Primero, es importante seguir de cerca la evolución de la economía global, especialmente los reajustes de políticas en las grandes economías, tales como Estados Unidos, China, la Unión Europea y Japón, que pueden afectar significativamente a Vietnam, para tener respuestas oportunas y efectivas apoyando a la comunidad empresarial nacional a modificar sus estrategias y planes de producción y negocios.

Segundo, hace falta desarrollar los mercados en Europa del Norte y del Este y América Latina, que todavía tienen mucho espacio para explotar. Al mismo tiempo, hay que entrar en los nuevos mercados con creciente clase media, tales como los E7 (China, la India, Brasil, Rusia, México, Indonesia y Turquía) y los halal (Oriente Medio, Malasia y Brunei). Además, es urgente finalizar los pasos necesarios para firmar y aplicar el TLC entre Vietnam e Israel, y agilizar las negociaciones con los países del Mercado Común del Sur (Mercosur), tales como Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay para explotar e incrementar la presencia en América Latina. Simultáneamente, hay que mirar hacia nuevos y potenciales mercados como la India, África, Oriente Medio y Europa del Este, así como aprovechar la rápida recuperación de la ASEAN y algunos países asiáticos para impulsar las exportaciones.

Tercero, resulta crucial implementar con eficiencia el “Proyecto de impulsar las exportaciones directas de empresas vietnamitas a las redes de distribución extranjeras hasta 2030”, promulgado por el Primer Ministro a través de la Decisión 1415/QD-TTg, del 14 de noviembre de 2022. Además, hay que elaborar la Estrategia para desarrollar los mercados hasta 2030, de manera que se pueda trazar orientaciones para desplegarla con eficiencia.

Cuarto, es necesario mejorar la capacidad exportadora de las localidades. En concreto, hay que incrementar el apoyo para que las localidades y empresas dirijan sus ventas hacia los canales oficiales, construir la marca de productos y promover las exportaciones sostenibles.

Quinto, se debe acelerar el desarrollo de las industrias auxiliares e incrementar la capacidad de nueva producción para autoabastecerse de materias primas, combustibles y materiales, en pos de satisfacer las necesidades de producción y aumentar el valor agregado y la competitividad de las exportaciones. Además, es importante seguir efectuando eventos de conexión para apoyar la participación de las firmas nacionales en las cadenas de suministro de las empresas de IED y las grandes compañías globales, y crear nuevos mercados para el desarrollo de las industrias.

Sexto, resulta fundamental renovar y mejorar las actividades de promoción comercial. Hay que acelerar el desarrollo del comercio electrónico, especialmente el transfronterizo, para promover las cadenas de suministro y la circulación de productos, ampliar los mercados e incrementar las exportaciones. Es importante seguir realizando las reuniones informativas  mensuales entre agencias del Ministerio de Industria y Comercio y las oficinas comerciales de Vietnam en el extranjero; y entre los ministerios y entidades relevantes y las localidades, asociaciones y empresas para proporcionar de manera oportuna la información sobre la demanda de los mercados (especialmente los nuevos y potenciales), sus nuevas normas y políticas; así como para ofrecer el asesoramiento de políticas a las agencias de gestión estatal y las firmas nacionales de exportación e importación.

Séptimo, se debe intensificar la divulgación de información sobre los TLC, especialmente los de nueva generación; incrementar el apoyo a la producción y el consumo sostenibles en las localidades, asociaciones y empresas, y mejorar la conciencia sobre esa labor y acelerar la sensibilización acerca de la tendencia ecologista en el consumo y las nuevas normas de los países desarrollados sobre la evaluación de la cadena de suministro de las exportaciones para cumplir con los estándares y requisitos cada vez más exigentes de los países importadores y aprovechar efectiviamente los TLC, en pos de ampliar y  diversificar los mercados, cadenas de suministro y productos exportables.

Octavo, hay que seguir implementando bien las medidas de facilitación comercial, sobre todo eliminar las barreras técnicas para apoyar la entrada de las empresas en nuevos mercados; acelerar la digitalización en la emisión del Certificado de Origen (C/O) preferencial y ofrecer instrucciones sobre las reglas de origen, la expedición del C/O y la autocertificación a los Servicios provinciales y municipales de Industria y Comercio, las asociaciones, empresas y entidades autorizadas por el Ministerio de Industria y Comercio. Además, es necesario agilizar el desarrollo de los servicios logísticos para reducir los costos y mejorar la competitividad de productos de exportación.

Para desarrollar el mercado interno: 

Primero, se debe continuar implementando con eficiencia los programas y proyectos de desarrollo del mercado interno⁽⁴⁾, poniendo énfasis en las actividades de promoción de productos vietnamitas, de conexión oferta-demanda y estímulo de consumo para facilitar la comercialización de los bienes nacionales en el mercado doméstico.

Segundo, es importante seguir perfeccionando el marco legal, políticas y el clima de negocios en el país, así como establecer el orden del mercado para adaptarse a la nueva situación.

Tercero, hay que acelerar la reestructuración del mercado interno promoviendo la innovación y la transformación digital, y aprovechando al máximo los logros de la cuarta Revolución industrial para incrementar la capacidad de integrarse a las cadenas de valor y redes regionales y globales.

Cuarto, es esencial agilizar la aplicación del comercio electrónico en la circulación y distribución de mercancías. En concreto, se puede estimular a los sistemas modernos de distribución a intensificar la aplicación de la tecnología de la información y desarrollar el comercio electrónico.

Quinto, hace falta construir y desarrollar infraestructuras comerciales sincrónicas, modernas y sostenibles para satisfacer la demanda de circulación de bienes en el país y apoyar las exportaciones. Además, se debe prestar especial atención al desarrollo de las infraestructuras en las zonas rurales, montañosas e insulares.

Sexto, hay que desarrollar diversos tipos de empresas que operan en el ámbito del comercio interno, y estimular a las compañías, cooperativas y hogares comerciales a renovar sus métodos operativos cada vez más modernos y profesionales.

Séptimo, es preciso aumentar el respaldo al establecimiento de grandes grupos/empresas distribuidores. Al mismo tiempo, hay que resolver las dificultades, elaborar y aplicar políticas destinadas a apoyar la participación de las empresas en las cadenas de suministro, especialmente de productos agrícolas./.

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(1) Documentos del XI Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam, Editorial Política Nacional Su That (La Verdad), Hanoi, 2011, págs. 116-117
(2) Documentos del XII Congreso Nacional del Partido, Editorial Política Nacional Su That (La Verdad), Hanoi, 2016, pág. 87
(3) Tales como: Las Leyes de Comercio, de Gestión del Comercio Exterior, de Competencia y de Protección de Intereses de Consumidores; las Estrategias de desarrollo de las exportaciones e importaciones en el período 2011-2020 y hasta 2030, y de desarrollo del comercio interno hasta 2030; la Planificación general del desarrollo del comercio de Vietnam en el lapso 2011-2020 y con visión hacia 2030; y el Plan de reestructuración del sector de industria y comercio en el plazo 2014-2020, con visión hacia 2030
(4) Tales como: El Proyecto “Renovar los métodos de comercio de productos agrícolas en el período 2021-2025, con visión hacia 2030; el Proyecto “Desarrollo del mercado doméstico asociado con la campaña “Vietnamitas utilizan productos hechos en Vietnam en el lapso 2021-2025”; el Programa de desarrollo comercial en las zonas montañosas, remotas e insulares y el Proyecto “Impulsar la participación directa de las empresas vietnamitas en las redes internacionales de distribución”
Este artículo fue publicado en la Revista Comunista No.1016 (junio de 2023)