Revista Comunista- Identificar y combatir los argumentos tergiversadores que buscan “despolitizar” el Ejército Popular de Vietnam (EPV), sabotear el liderazgo del Partido Comunista sobre esas fuerzas y socavar su unidad con el pueblo, es un contenido fundamental en el trabajo de construcción y rectificación de las filas partidistas. Se trata de una tarea prioritaria de todo el Partido, el pueblo, el Ejército y el sistema político; una labor consciente y continua de los comités, organizaciones, cuadros y miembros del Partido.

1- Como parte de la llamada estrategia de “evolución pacífica” para sabotear la Revolución vietnamita, en los últimos años, las fuerzas hostiles y reaccionarias han presentado numerosas tergiversaciones con el objetivo de “despolitizar” el EPV, vulnerar el liderazgo del Partido Comunista de Vietnam (PCV) sobre el Ejército y dividir la unidad de este último con el pueblo. Buscan manipular con la intención de cambiar la naturaleza de clase obrera, el carácter popular y nacional del Ejército, alejándolo gradualmente de sus objetivos de lucha y sus ideales como una fuerza política confiable y combativa con absoluta lealtad a la Patria, el Partido, el Estado y el pueblo.

En el libro “Algunas cuestiones sobre la política militar y la estrategia de defensa en la causa de construcción y salvaguarda de la Patria socialista de Vietnam en el nuevo período”, el difunto secretario general del PCV Nguyen Phu Trong señaló claramente: “En esencia, la ‘despolitización’ del Ejército es una artimaña extremadamente insidiosa de las fuerzas hostiles para sabotear la Revolución, separar al Ejército del liderazgo del Partido Comunista de Vietnam y alejarlo de su papel como un arma afilada, una fuerza política confiable del Partido y el Estado”(1). Para llevar a cabo esa conspiración, las fuerzas hostiles y reaccionarias emplean métodos cada vez más sofisticados e insidiosos. Se centran en distorsionar y negar el papel de liderazgo del PCV sobre el Ejército, la gestión del Estado en defensa y seguridad; difamar la tradición y la naturaleza revolucionaria del EPV; manipular e inducir a oficiales y soldados para que rechacen el liderazgo absoluto y directo del Partido en todos los aspectos del Ejército; incitar que “el Ejército sólo debe obedecer la Constitución y la ley, no el liderazgo del Partido” y refutar la dirección del PCV sobre dicha fuerza. También demandan la eliminación del sistema de organizaciones partidistas, agencias y cuadros políticos en el Ejército, exigiendo la construcción de un Ejército “neutral” y “nacional”, que no dependa de ninguna tendencia política o partido. Alaban y glorifican el modelo de fuerzas armadas de algunos países capitalistas para demostrar que “el Ejército no está relacionado con la política”; llaman al EPV a aliarse con los Ejércitos de algunos países para avanzar hacia la modernización y convertirse en una fuerza profesional. Según ellos, los asuntos relacionados con el ámbito militar y la defensa deben ser discutidos públicamente por el pueblo y decididos en “foros democráticos”. Aprovechan la política de simplificación de plantilla, reorganización y reestructuración del Ejército para tergiversar, incitar y hacer acusaciones infundadas, afirmando que se trata de manifestaciones de corrupción, intereses de grupo, privilegios y beneficios indebidos de una parte de los cuadros y militantes del Partido dentro del Ejército.... Paralelamente, intensifican el sabotaje en los ámbitos ideológico, cultural y moral, difundiendo un estilo de vida pragmático, disoluto e indiferente a los problemas sociopolíticos del país y del Ejército, promoviendo las manifestaciones de “autoevolución” y “autotransformación”, generando un vacío ideológico para “diluir” y hacer "desvanecer" la naturaleza de clase obrera, el carácter popular y nacional del EPV, creando un “terreno fértil” para que las ideas no proletarias penetren en la vida espiritual de los oficiales y soldados.

Más peligrosamente, para llevar a cabo la conspiración de “despolitizar” el Ejército, las fuerzas hostiles y reaccionarias recurren a forma externa a las redes sociales para difundir artículos y videoclips con una intensidad y frecuencia crecientes, con el propósito de distorsionar la realidad, ahondar en las contradicciones, incitar al afán de mérito personal, estatus, faccionalismo, regionalismo, exigencias de trato preferencial; generar odio y discordia entre etnias, religiones y regiones; calumniar y difamar el honor, la dignidad y el prestigio. Se aprovechan de ciertos actos que violan la ley y la disciplina, ocurridos en el Ejército para inferir y separar al EPV del pueblo y el Partido; distorsionan las funciones y tareas del Ejército, deshonrando la imagen y la naturaleza de los “Soldados del Tío Ho”...

Consciente profundamente de la necesidad, dificultad, duración y complejidad de la tarea de defender al Partido, el Estado, el pueblo y el socialismo, y cumpliendo con las funciones y tareas asignadas, en los últimos años, bajo el liderazgo del Partido y la gestión centralizada y unificada del Estado, la Comisión Militar Central, el Ministerio de Defensa, los comités partidistas y los comandantes de todos los niveles dentro del Ejército han comprendido e implementado estrictamente las resoluciones, directivas, conclusiones e instrucciones del Comité Central del PCV sobre el trabajo ideológico y teórico, en aras de reforzar la protección de la base ideológica del Partido y combatir las opiniones erróneas y hostiles en la nueva situación. Han tomado la iniciativa en la investigación estratégica, prediciendo concisamente la situación, las conspiraciones, las artimañas y las actividades de sabotaje de las fuerzas hostiles; han asesorado y propuesto de manera oportuna al Partido y el Estado sobre numerosas directrices y soluciones de liderazgo para defender la base ideológica y proteger al Partido, el Estado, el pueblo y el socialismo. De esta manera, han contribuido a mantener, fortalecer y salvaguardar la base ideológica del Partido en la nueva situación.

2- En el tiempo venidero, las fuerzas hostiles y reaccionarias seguirán intensificando sus ataques contra los lineamientos y directrices del Partido y las políticas y leyes del Estado de Vietnam, a través de diversas formas y métodos sofisticados, astutos e impredecibles, incluso de manera más pública, directa y agresiva. Continuarán difundiendo argumentos distorsionados y erróneos con el fin de “despolitizar” el Ejército, sabotear el liderazgo del Partido sobre el EPV y dividir su unidad con el pueblo. Para luchar, denunciar y desenmascarar la esencia de esas falacias y puntos de vista erróneos, se están concentrando en implementar algunas soluciones fundamentales, entre ellas:

Uno, mantener y fortalecer el liderazgo absoluto y directo del Partido sobre el Ejército en todos los aspectos.

Es crucial comprender a fondo las resoluciones, directivas, conclusiones e instrucciones del Comité Central del PCV, especialmente la Resolución N.º 35-NQ/TW y el proyecto “El Ejército previene y lucha contra la 'evolución pacífica' en el ámbito ideológico y cultural en la nueva situación”. La Comisión Militar Central, el Ministerio de Defensa, los comités partidistas y los comandantes de todos los niveles deben dirigir la organización proactiva y activa de las fuerzas encargadas de cumplir la tarea de identificar y combatir las tergiversaciones que buscan “despolitizar” el EPV, sabotear el liderazgo del Partido sobre el Ejército y dividir su unidad con el pueblo.

Los comités y organizaciones del Partido, los comisarios, los oficiales políticos, los comandantes y las agencias políticas de todos los niveles deben centrarse en liderar y dirigir eficazmente el trabajo de propaganda y educación para elevar la conciencia y la responsabilidad de los oficiales y soldados; determinar esta como una tarea política urgente, regular y duradera para cada unidad e individuo. Deben desarrollar planes y contenidos para identificar y combatir las tergiversaciones, prever con precisión la situación y adoptar medidas preventivas con anticipación para evitar caer en la pasividad o ser sorprendidos ante cualquier circunstancia. En particular, los órganos políticos de todos los niveles deben cumplir con eficacia sus funciones de asesoramiento, dirección y orientación; promover el papel de las organizaciones de masas, los consejos militares y coordinar estrechamente con las fuerzas funcionales, comités partidistas y autoridades locales para llevar a cabo de manera efectiva la lucha contra los argumentos erróneos que buscan “despolitizar” el EPV. De ese modo, se aprovecharán los resultados y experiencias acumulados, aplicándolos de forma flexible y desarrollándolos creativamente en las nuevas condiciones y circunstancias.

Dos, renovar con frecuencia el contenido, las formas y los métodos de identificación y lucha contra las tergiversaciones y los puntos de vista erróneos.

Actualmente, los argumentos erróneos y tergiversados que buscan “despolitizar” el EVP evolucionan de manera constante en cuanto a contenido, forma y métodos. Por tal motivo, la labor de identificación y lucha contra ese mal debe centrarse en reafirmar la exactitud y la cientificidad del marxismo-leninismo, el pensamiento de Ho Chi Minh, las directrices y lineamientos del Partido y las políticas y leyes del Estado. Es vital exponer el carácter reaccionario y anticientífico, así como las actividades subversivas de las fuerzas hostiles; vincular estrechamente la construcción con la lucha, en la que “construir” es lo fundamental, y “luchar” debe hacerse con determinación y eficacia.

La identificación y el combate directo contra los argumentos erróneos y tergiversados deben realizarse de diversas maneras y por muchos medios; de forma persistente, regular y continua en todos los niveles, agencias y unidades, dentro de cada organización e individuo. Su implementación debe efectuarse en múltiples capas, etapas y niveles, adecuada a cada objetivo, sector y momento específico. Se ha de fortalecer el trabajo de comunicación y difusión, destacando la información positiva en los canales de prensa, radio, televisión, internet y redes sociales. En particular, las agencias noticiosas del Ejército deben identificar nuevas formas de divulgación que sean apropiadas y se adapten al nivel de comprensión de cada público específico. Deben seguir de cerca los eventos políticos y los temas de interés público, comprender siempre las conspiraciones, artimañas y actividades subversivas de las fuerzas hostiles, detectar oportunamente la información falsa, tóxica y distorsionada para orientar el pensamiento y la opinión pública, y publicar artículos que la rectifiquen. Hay que impulsar la creación y diversificación de páginas web y medios de comunicación centrados en identificar y combatir los argumentos erróneos y tergiversados que buscan “despolitizar” el EPV, sabotear el liderazgo del Partido sobre el Ejército y dividir su unidad con el pueblo. Es preciso enfocarse en la construcción de secciones y programas especializados, e intensificar la publicación de noticias y artículos que refuten y desenmascaren el carácter reaccionario y anticientífico de las tergiversaciones de las fuerzas hostiles que buscan difamar al Partido, el Estado y el socialismo.

Se debe promover la formación política en las unidades, las actividades de divulgación oral y a través del equipo de relatores en todos los niveles para identificar y combatir los argumentos erróneos y tergiversados, con el fin de orientar oportunamente la información positiva a los oficiales, miembros del Partido, soldados y pobladores. Es imperativo continuar optimizando el papel de las academias y escuelas militares en la mejora de la calidad de enseñanza de las asignaturas de teoría política, para que se alineen con los nuevos requisitos y objetivos de formación. Según la situación específica, cada nivel debe regular los contenidos, formas y métodos del estudio de la teoría política para los oficiales, miembros del Partido y soldados. Se debe poner énfasis en la investigación para aclarar las bases teóricas y prácticas de las directrices y lineamientos del Partido, así como las políticas y leyes del Estado; fomentar el intercambio y la discusión democrática y franca, ayudando a los oficiales, miembros del Partido y soldados a elevar su conciencia para resolver por sí mismos las dificultades que plantea la vida real.

Tres, concentrar los esfuerzos en construir una fuerza especializada y pionera en la identificación y combate contra los argumentos erróneos y tergiversados.

El Ejército debe continuar consolidando y construyendo una fuerza especializada y pionera en la identificación y el combate contra los argumentos tergiversados. Esta fuerza, en primer lugar, Esta fuerza, en primer lugar, debe estar compuesta por cuadros y militantes del Partido que posean capacidades, ética, estilo de vida y competencias profesionales; con firmeza política, determinación e integridad; que tengan el coraje, entusiasmo y perseverancia para luchar en defensa de la base ideológica del Partido. Deben contar con un buen nivel teórico y práctico, conocimientos en tecnología de la información y lenguas extranjeras, pensamiento creativo y la capacidad de aplicar la teoría a la práctica de manera eficaz. Asimismo, deben tener habilidades para buscar documentos, recopilar y actualizar información, y redactar noticias y artículos para divulgar las orientaciones y líneas del Partido, las políticas y leyes del Estado, ejemplos de “personas buenas, acciones buenas”, así como para combatir y refutar puntos de vista erróneos y hostiles. También deben ser capaces de identificar, seguir, analizar, evaluar y comprender a fondo las conspiraciones, artimañas y métodos de operación de las fuerzas hostiles. Al mismo tiempo, esta fuerza medular y especializada necesita comprender las actitudes, creencias, estados de ánimo y opiniones de los oficiales y soldados en la unidad y del pueblo frente a incidentes complejos, sensibles, o “puntos críticos” que surjan, así como ante información falsa, distorsionada y tergiversada que busca sabotear al Partido, el Estado y el Ejército.

Tal como afirmó el difunto secretario general Nguyen Phu Trong: “Ante las exigencias de la nueva situación, con sus propias condiciones y capacidades, más que nadie, el Ejército debe ser pionero y luchar aún más enérgicamente contra las opiniones erróneas y hostiles, no sólo en la prensa, sino también dentro de sus filas y en la sociedad, evitando de manera absoluta que surjan y existan puntos de vista erróneos sobre el Ejército”(2).

Con la buena naturaleza y tradición de los “Soldados del Tío Ho”, el Ejército vietnamita está decidido a promover la gloriosa tradición de sus 80 años de construcción, combate, victorias y madurez, superando las dificultades y desafíos. Los oficiales y soldados del EPV cumplirán sin duda sus importantes misiones con la dignidad de ser la fuerza central y pionera en la defensa de la base ideológica y la salvaguarda del Partido, el Estado, el pueblo y el socialismo, contribuyendo a combatir contra todas las conspiraciones y artimañas de las fuerzas hostiles que buscan llevar a cabo la “evolución pacífica” y la “despolitización” del Ejército./.
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(1) Nguyen Phu Trong: Algunas cuestiones sobre la política militar y la estrategia de defensa en la causa de construcción y salvaguarda de la Patria socialista de Vietnam en el nuevo período, Editorial Política Nacional Su That (La Verdad), Hanoi, 2023, pág. 27
(2) Nguyen Phu Trong: Algunas cuestiones sobre la política militar y la estrategia de defensa en la causa de construcción y salvaguarda de la Patria socialista de Vietnam en el nuevo período, Ibíd., págs. 87-88