Garantizar la seguridad económica en medio del desarrollo de la economía de mercado, la integración global y la industria 4.0

LUONG TAM QUANG
Coronel general, Miembro del Comité Central del Partido Comunista de Vietnam, Viceministro de Seguridad Pública

22:10, 27-03-2023

Revista Comunista - Garantizar la seguridad económica es un tema de interés especial y constante del Partido Comunista y el Estado de Vietnam. La policía se encarga de ese proceso como fuerza clave. En la actualidad, esta tarea enfrenta múltiples desafíos que requieren soluciones apropiadas para mantener la independencia, la soberanía y los intereses económicos de la nación, así como identificar con anticipación y responder con eficiencia a los riesgos que amenazan la seguridad económica del país.

Policías vietnamitas ayudan a turistas extranjeros _Fuente: Policía de Hanoi

Garantizar la seguridad económica, un importante asunto en medio del desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista

Conscientes de los riesgos, desafíos y amenazas a la economía en medio del desarrollo de la economía de mercado y la integración global, el Partido Comunista y el Estado de Vietnam conceden constante atención a la garantía de la seguridad económica. Ese interés se refleja en los documentos de los congresos partidistas desde el VI hasta el XII, al igual que en diferentes directrices del Buró Político y documentos del Gobierno(1). Durante el XIII Congreso Nacional, a partir del resumen de las lecciones aprendidas a lo largo de 35 años de Doi Moi (Renovación), la cuestión  de la seguridad económica se mencionó de forma oficial en las orientaciones y tareas de seguridad, lo que creó una importante base para uniformar las percepciones y acciones en todo el Partido, el pueblo y el Ejército, en pos de prevenir, enfrentar y neutralizar las amenazas y desafíos  emergentes contra la seguridad económica en medio del desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista, la integración global integral, amplia y profunda, y el avance vigoroso de la cuarta revolución industrial.

Al divulgar y poner en marcha los lineamientos del PCV, los comités partidistas, gobiernos, organizaciones de masas, instituciones económicas y entidades de servicio público, desde el nivel local hasta el central, han definido claramente las responsabilidades a la hora de dirigir y cumplir la tarea de vincular la economía con la defensa y seguridad, y han eliminado las limitaciones en la percepción y el comportamiento de inclinarse demasiado a la economía subestimando la garantía de la seguridad, así como han movilizado la fuerza de todo el sistema político para la protección de la seguridad económica. Como resultado, la estabilidad macroeconómica se mantuvo, mientras la envergadura y potencial de la economía creció todos los años, incluso en medio de la evolución compleja de la pandemia del COVID-19. La capacidad de autonomía productiva se fortaleció, y la independencia y autonomía de la economía de mercado con orientación socialista se mantuvo firme. La inversión extranjera creció de manera constante y se mantuvo en niveles altos en los últimos años, mientras se garantizaron la seguridad y el bienestar social.

Se ha perfeccionado paso a paso el sistema de mecanismos, políticas y leyes sobre la garantía de la seguridad económica. Las estrategias, planificaciones, planes, programas y proyectos de desarrollo socioeconómico a nivel nacional, sectorial y local se elaboraron y revisaron con seriedad, satisfaciendo las necesidades de desarrollo económico y fortalecimiento de la defensa y seguridad. Además, se elaboraron de forma activa planes y medidas de seguridad bancaria, financiera, monetaria, de reservas del presupuesto estatal y de deudas públicas. Los planes de respuesta a posibles “vientos adversos” y “choques” económicos desde el exterior se encontraron más proactivos; mientras los remedios comerciales y las medidas contra el abuso de las actividades de cooperación económica, comercial, turística e inversionista para dañar la seguridad económica y los intereses nacionales se implementaron de manera proactiva.

La fuerza de seguridad pública popular promueve su papel clave en la garantía de la seguridad económica

Con su papel y funciones en la garantía de la seguridad económica, la fuerza de la seguridad pública tomó la iniciativa para prevenir, detectar y luchar contra los intentos de socavar la seguridad económica y los delitos económicos; así como la corrupción y otros fenómenos negativos en los sectores de la economía. Esta fuerza actuó de manera intensificada a la hora de seguir de cerca y evaluar la situación para ofrecer asesoramiento al Partido Comunista de Vietnam (PCV) y el Estado sobre los lineamientos y soluciones de gestión macroeconómica, reestructuración económica, integración global y atracción de inversiones extranjeras, protección de los intereses nacionales y defensa de la seguridad del país en las negociaciones, la firma y aplicación de los tratados de libre comercio (TLC) bilaterales y multilaterales. Además, participó en el perfeccionamiento del sistema legal, contribuyendo a la mejora de la gestión estatal sobre la economía y apoyando el desarrollo de la producción y los negocios. Detectó los “agujeros” en la gestión y solución de las violaciones de los grupos, corporaciones, empresas estatales e instituciones crediticias, y presentó propuestas para “sanear” las actividades empresariales, sobre todo del sistema bancario. También desempeñó el papel coordinador y ofreció instrucciones a los ministerios, agencias y localidades sobre la garantía de la seguridad de las actividades económicas, especialmente durante la reestructuración de las compañías estatales y el desarrollo de las zonas económicas, los parques industriales, zonas de procesamiento y áreas de alta tecnología. Elaboró y aplicó medidas para garantizar la seguridad energética, ambiental, turística, alimentaria, agrícola y silvícola, de la economía marítima y en los proyectos, obras y objetivos económicos clave. Al mismo tiempo, previno y luchó contra las intrigas de las fuerzas hostiles y reaccionarias, así como los delitos económicos. La policía llevó a cabo frecuentes operaciones contra la delincuencia y los delitos económicos tales como el contrabando, fraudes comerciales y la falsificación de mercancías, creando un clima seguro y sano para la producción y los negocios.

En medio de la intensificación del desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista y la integración global, y frente al avance vigoroso de la cuarta revolución industrial, Vietnam goza de oportunidades y condiciones favorables para un crecimiento rápido, pero al mismo tiempo enfrenta muchas dificultades y desafíos. Persiste el riesgo de desviarse del camino socialista, mientras que las fuerzas hostiles no cesan de acelerar la “autoevolución” entre las filas partidistas para alterar los lineamientos y políticas económicas de Vietnam y luego aprovechar al máximo el hecho de que el país  negocia y firma los TLC de nueva generación, con la intención de introducir y generar presión para obligarlo a aceptar las condiciones económicas anexas, como palanca para desorientar e infiltrarse en los asuntos interiores, y robar los secretos de Estado en el sector económico.

La competencia estratégica, las desavenencias económicas y comerciales entre las potencias y la tendencia alcista del proteccionismo han creado dificultades y desafíos a la economía y la garantía de la seguridad económica, especialmente para una abierta y dependiente de la exportación como la vietnamita. Se vuelven cada vez más palpables los riesgos tales como el aumento de la dependencia de otros países a través de los proyectos de cooperación concretos cuando Vietnam participa en las estrategias e iniciativas de otras partes implementadas en Asia-Pacífico en general, y en el Sudeste de Asia en particular; el retraso económico; la falta de la autonomía estratégica y resiliencia a los choques desde el exterior; el deterioro de las potencialidades nacionales y la ralentización del ritmo de crecimiento.

La economía de Vietnam enfrenta riesgos que amenazan la sostenibilidad de su desarrollo y el equilibrio macroeconómico. El lado adverso de la economía de mercado y la integración internacional en esa esfera ha afectado de manera negativa la estabilidad económica, especialmente a través de desafíos globales tales como la seguridad cibernética; crisis financieras, alimentarias y energéticas; crímenes transnacionales y de alta tecnología; la falsificación de dinero y su propagación; fraudes comerciales y económicos, el contrabando, la evasión de impuestos y la aplicación de “precios de transferencia” manipulados para maximizar los beneficios empresariales minimizando las obligaciones tributarias con el presupuesto estatal. Otras amenazas derivan del cumplimiento de los compromisos de integración económica internacional, especialmente los TLC de nueva generación; de la crisis económica global que resulta en la incertidumbre política, económica y social en otros países y tiene eco en Vietnam; y de los intentos hostiles de aprovechar la integración económica para generar presión sobre la política, defensa y seguridad complicando la situación. Además, las huelgas en las zonas económicas, parques industriales y empresas de inversión extranjera; disputas y denuncias relativas a la tierra y la preparación del suelo para la ejecución  de los proyectos; manifestaciones y perturbaciones relacionadas con la contaminación ambiental causada por las actividades empresariales, especialmente las de inversión extranjera directa, son pretextos para que las fuerzas hostiles y reaccionarias reúnan fuerzas y ensayen revoluciones de color.

Las brechas en las condiciones de vida entre las regiones, la desigual distribución de la riqueza y la polarización social persisten. Algunos temas que provocan gran inquietud en la sociedad, tales como el empleo y los ingresos, se resuelven de manera lenta; la corrupción, burocracia y desigualdad social persisten; mientras los errores en la aplicación de las políticas de desarrollo, sobre todo en la reestructuración económica, la conversión de empresas estatales en sociedades anónimas y el uso de los recursos terrestres, forestales y marinos al servicio del progreso socioeconómico aumentan el riesgo de pérdidas de bienes estatales, disminuyen la fuerza nacional, obstaculizan el desarrollo socioeconómico y erosionan la confianza del pueblo en el Partido y el Estado, amenazando el crecimiento rápido y sostenible del país. Los desafíos de seguridad emergentes, sobre todo el cambio climático y las epidemias, continúan causando daños significativos y duraderos, convirtiéndose en una amenaza contra el desarrollo socioeconómico sostenible y el objetivo de reducción sustentable de la pobreza. La delincuencia y las violaciones de las leyes económicas evolucionan de manera compleja, con la aparición de nuevas formas delictivas durante el proceso de desarrollo de la economía digital, lo que obstaculiza el avance económico del país.

Garantizar la seguridad económica para satisfacer las necesidades de desarrollo en la nueva etapa

Para fortalecer la protección de la seguridad económica en medio del desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista, la integración global y la cuarta revolución industrial, y en cumplimiento de los lineamientos del PCV al respecto, hay que estudiar a fondo algunos de los siguientes puntos de vista fundamentales y realizar las siguientes tareas principales:

Primero, concientizar y crear el consenso de que la seguridad económica es un término muy amplio, que abarca la seguridad energética, financiera, bancaria, alimentaria, hídrica y de las telecomunicaciones, así como temas convencionales y emergentes. Su garantía desempeña el papel trascendental en la protección de la seguridad nacional al significar la defensa del cumplimiento de los lineamientos y políticas de desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista, diversificación y multilateralización de las relaciones económicas internacionales, alineación de la integración económica global con la construcción de una economía independiente y autónoma, y el papel protagónico del sector estatal, así como la combinación estrecha entre el desarrollo económico y la garantía de la defensa, seguridad y las relaciones exteriores.

Garantizar la seguridad económica debe ser una tarea regular de los comités partidistas, sectores, agencias y todo el pueblo, siendo los protagonistas los comités partidistas y dirigentes de los ministerios, agencias, sectores y gobiernos de las provincias y ciudades, las compañías y empresarios bajo el liderazgo del PCV y la gestión del Gobierno, mientras que la fuerza de seguridad pública desempeña el papel de núcleo y asesor. Solo con la seguridad económica garantizada, se puede crear un clima favorable y seguro para el emprendimiento de negocios, el desarrollo rápido y sostenible de la economía, el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica, el impulso de la modernización, industrialización e integración global del país. Esa tarea se asocia con la garantía de la seguridad política interna, la protección de los cuadros y militantes, y la prevención y lucha contra la corrupción.

Segundo, clarificar los requisitos de garantía de la seguridad económica. Fortalecer el liderazgo del PCV sobre esa tarea en medio del desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista, la integración global y la cuarta revolución industrial contribuirá al crecimiento económico rápido y sostenible y a la garantía de la seguridad social, la defensa, seguridad y las relaciones exteriores. Es fundamental crear cambio en la percepción y responsabilidad de los comités partidistas, ministerios, agencias, sectores, empresas, gobiernos locales, cuadros y militantes para que tomen la iniciativa en detectar y formar parte de la lucha contra las intrigas de las fuerzas hostiles y reaccionarias y los delitos económicos. Elevar la eficiencia de la garantía de la seguridad económica de las autoridades, favorecerá las actividades normales de las compañías y empresarios.

Tercero, combinar de manera estrecha y armónica el desarrollo socioeconómico, la integración global y la garantía de la seguridad económica. Es decir, a la hora de implementar las políticas de desarrollo socioeconómico y atracción de capitales hay que prestar atención a la garantía de la seguridad y el orden. La protección de la seguridad económica es una parte inseparable de cada política, paso, plan y proyecto de inversión. Además, hay que conceder importancia a la evaluación de los proyectos de cooperación internacional e inversión foránea en las áreas estratégicas en términos de defensa y seguridad, y supervisar los proyectos en las zonas “sensibles” tales como las fronterizas y los lugares clave, justo desde su evaluación y expedición de licencia hasta la implementación.

Cuarto, fortalecer la formación política e ideológica para los cuadros y militantes identificando claramente la combinación estrecha entre la economía y la defensa, la seguridad y las relaciones exteriores en todas las actividades económicas, en pos de asegurar la transparencia, solidez, unidad y consenso del aparato partidista, los cuadros y las instituciones económicas. Elevar el nivel de la teoría política, los conocimientos económicos y legales, habilidades profesionales y las condiciones de vida material y espiritual de los trabajadores. Impulsar la concientización para redoblar la vigilancia ante las acciones de sabotaje económico de las fuerzas hostiles y reaccionarias. Controlar la información y la opinión pública que provoque daños a la economía, especialmente los sectores clave. Intensificar la protección de los cuadros, militantes y secretos de Estado en la economía, prestando especial atención a las entidades encargadas de la planificación de políticas.

Quinto, impulsar la prevención y lucha contra los intentos de aprovechar los asuntos económicos para dañar la independencia y autonomía de la economía, cimentar la alteración política desde el interior, crear la dependencia y transgredir los intereses y la seguridad nacionales. Detectar e impedir de manera oportuna los delitos económicos, mientras se mejora la gestión estatal sobre la seguridad económica. Garantizar el cumplimiento serio de las regulaciones legales relativas al manejo del presupuesto estatal, las inversiones y bienes públicos; y la gestión de la seguridad financiera, cibernética y de las deudas públicas, así como la protección de los secretos de Estado en la economía. Redoblar la supervisión de los órganos electos sobre la aplicación de las leyes y políticas relativas a la garantía de la seguridad económica. Seguir perfeccionando las políticas y leyes al respecto y mejorar la capacidad de aplicarlas, especialmente en los asuntos sobre la tierra, el medioambiente y la adaptación al cambio climático./.

-------------------------

(1) La Directiva No.05-CT/TW, del 14 de octubre de 2006, del Buró Político sobre “El fortalecimiento del liderazgo sobre la garantía de la seguridad nacional en la nueva situación”; la Directiva No.46-CT/TW, del 22 de junio de 2015, del Buró Político sobre “El fortalecimiento del liderazgo del PCV sobre la garantía de la seguridad y el orden en la nueva situación”; la Directiva No.12-CT/TW, del 5 de enero de 2017, del Buró Político sobre “El fortalecimiento del liderazgo del PCV sobre la garantía de la seguridad económica en medio del desarrollo de la economía de mercado con orientación socialista y la integración económica global”. El Gobierno emitió la Resolución 88/NQ-CP, del 13 de septiembre de 2017, sobre el despliegue de su Plan de acción para implementar la Directiva No.12-CT/TW. 
Este artículo fue publicado en la Revista Comunista No.1002 (noviembre de 2022)